Sobre las consecuencias

Una pequeña historia
Había un niño que tenía mal carácter.
Un día su padre le dio una bolsa de clavos y le dijo que cada vez que perdiera la calma, debería clavar un clavo en la cerca detrás de la casa. El primer día el niño clavó 37 clavos.
Pero poco a poco fue calmándose porque descubrió que era mucho más fácil controlar su carácter que clavar los clavos.
Finalmente llegó el día en que el niño no perdió la calma para nada y se lo dijo a su padre. Entonces el papá le sugirió que por cada día que se controlara, debía sacar un clavo de la cerca.
Los días pasaron y el niño pudo decirle a  su padre que ya había sacado todos los clavos de la cerca; entonces el papá llevó de la mano a su hijo a la cerca y le dijo: 
“Mira hijo, has hecho bien, pero fíjate en todos los agujeros que quedaron; ya la cerca nunca puede ser como antes. Cuando dices o haces algo con coraje, dejas una cicatriz  como ese agujero en la cerca. La herida ya quedó hecha. No importa cuántas veces pidas disculpas, la herida está ahí…..una herida física es igual de grave que una herida verbal.

¿…..SABÍA USTED QUE…..?

Para ser más comprensivos y tolerantes es importante saber que:
1.    A medida que los niños crecen y son capaces de expresarse mejor con palabras, disminuye la frecuencia, iniciación y duración de episodios de agresividad (Cummings y otros).
2.  La agresividad aparece con mayor frecuencia en hogares, en donde la función de los padres no es efectiva (Paterson y otros).
3.    Los castigos son efectivos cuando:
ü  Son coherentes con la falta
ü  Van acompañados de reflexión y explicación
ü  Los aplica una persona que tiene buenas relaciones con el niño
4. La mayoría de los niños se tornan menos agresivos después de los 6 o 7 años, cuando la empatía reemplaza al egoísmo.
5.    Padres que con frecuencia NO refuerzan comportamientos positivos y son muy severos e inconsistentes al castigar ciertos comportamientos no deseados, están contribuyendo a que los niños sean agresivos.

Lo que no se debe hacer

      NO SE DEBE                                                                   POR QUÉ

Ø  Castigar físicamente a su hijo                                  Le está dando permiso para que
                                                                              también lo haga.

Ø  Reírse o festejar aquellas situaciones                     Esto anima al niño a repetir la
conducta.
           
Ø  Gritar: los gritos son una forma de                          Aprenderá a comunicarse de la
            comunicación agresiva. Si usted                              misma manera.
            responde con gritos a su hijo.
                         
Ø  Utilizar castigos severos para disciplinar                 Estos generan baja autoestima,
a su hijo                                                                  temor e inseguridad. Busque
otras alternativas para disciplinar a su hijo.





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